El mundo abocado a grandes cambios

Autor Ramón Liriano

El mundo está abocado a grandes cambios. Si se hace un balance de los momentos y los factores históricos que han promovido importantes transiciones hacia estadios superiores, se evidencia que han tenido como antesala grandes y profundas crisis en el orden económico.

Nadie puede negar que hoy los principales centros económicos mundiales se tambalean, presionados por momentos de dificultades, forzando a acciones que buscan reorientar las economías.

Las quiebras de tradicionales instituciones bancarias de los Estados Unidos y de otros poderes internacionales, acompañada de las caídas de la bolsa de valores, son factores que están exigiendo esos cambios.

El derrumbamiento de los pagos en los bienes raíces de los Estados Unidos, muy específicamente, los pagos hipotecarios, y los vaivenes en los precios del petróleo, tienen que ver con un manejo inadecuado, o tal vez por las luchas de intereses, se inscriben en esa realidad que originando nuevos comportamientos en las economías de las naciones.

Podemos sumarle a esos factores la entrada al comercio mundial de países de grandes desarrollo demográfico, como China, La India y otros, demandando bienes y servicios, induciendo un desbalance en la oferta y demanda, que se expresa en la economía.

Todo esto influye en que las naciones tengan que reorientar sus economías hacia renglones que habían sido abandonados.

No está al margen de estos cambios el hecho de que algunos países se han salido de la tutela que históricamente tenían potencias mundiales sobre ellos buscando nuevos horizontes.

Asimismo, el hecho de que la lucha porque las grandes naciones adopten políticas destinada a enfrentar de manera concreta los factores que han originado la pobreza. Hoy se está demandando mayor responsabilidad y la confección de presupuestos para abordar la miseria que padecen países africanos y latinoamericanos respecto a altos niveles de pobrezas que los azotan.